CAUSAS SISTÉMICAS DE LAS ADICCIONES DE LOS HIJOS

Fumar, beber alcohol, consumir drogas, realizar compras compulsivas, o jugar sin control. Estos son comportamientos a los que algunas personas se habitúan fácilmente. Porque producen satisfacción y llenan carencias y vacíos. Produciendo un alivio momentáneo y es lo que justifica la repetición de dicho comportamiento. Pero, ¿Cuáles son las causas sistémicas de las adicciones? ¿Qué están mostrando las adicciones de nuestros hijos o seres queridos? ¿De dónde vienen las adicciones?

Las personas pierden poco a poco su libertad. Porque van considerando la compulsión o impulso incontrolable, como parte de su identidad. Convirtiéndose en adicciones y estos problemas son muy comunes en nuestras sociedades de consumo que convierten en primarias necesidades secundarias.

¿Qué produce adicciones en los hijos?

Sustituir el amor y la atención por regalos.

Los padres suplen su ausencia, con regalos o cosas materiales . Se suelen satisfacer las carencias emocionales de los hijos, por el sentimiento de culpa de los padres. Esto acrecienta más el deseo de sus hijos en obtener “cosas exteriores” para satisfacer su vacío interno.

Un duelo abierto, por la pérdida de un hijo o aborto.

La pareja, no suele acompañarse en su dolor. Entonces, lo reprimen o lo lleva en soledad. Esto trae como consecuencia, una separación silente entre ellos.

Los hijos se identifican con el dolor de la madre o del padre. Y empiezan a buscar, también la muerte para atraer la atención de los padres. Podemos observar en estos casos a niños que cuando pequeños son propensos a los accidentes o hiperactivos.

Más adelante recurren a las adicciones buscando esa muerte, de manera inconsciente. Además de cubrir el vacío de la ausencia, por el dolor de uno o ambos padres.

Resentimiento de uno de los padres con el otro.

Cuando uno de los padres está molesto, por el comportamiento del otro. Suele victimizarse y hacer ver ante los hijos que su sufrimiento se debe al otro progenitor.

Entonces los hijos por lealtad con el padre que sufre, no son capaces de tomar al otro. Que supuestamente es el “perpetrador”. Por lo tanto, rechazan la parte suya que se parece a ese padre. Quieren destruirla, en sí mismos.

El hijo, no se siente aceptado completamente y empiezan repetir con su vida la historia del padre rechazado. Odian parecerse al padre y por eso entran, en una espiral autodestructiva. Que en algunos casos, los puede llevar a la muerte.

Implicación transgeneracional.

Muerte imprevista de un familiar joven cuando la persona adicta era muy pequeña o cuando estaba en el vientre materno.

En estos casos, el duelo de la familia es muy intenso. Y suele existir una mezcla de sentimientos de culpa, ira, miedo, etc.

Y esto es captado por el niño, que suele ser llamado con el apodo o nombre de la persona fallecida. O los miembros de los familiares, le buscan similitudes con el fallecido.

Entonces la persona por identificación termina buscando también la muerte por medio de las adicciones. En casos, de ludopatía o compras compulsivas.

Se sigue, a un ancestro que se fue a la ruina, o murió en la familia, por asuntos de dinero.

Entonces se crea una sensación de culpabilidad con el dinero, que lleva a no querer retenerlo en las manos.

Lealtad inconsciente a un ancestro.

Cuando alguien es excluido o rechazado en la familia, por haber sufrido algún tipo de adicción. Más adelante, un descendiente repite en su vida la historia. Con la finalidad de que esa persona excluida, vuelva a pertenecer. O bien, sea reconocida de nuevo como miembro de la familia. Puede que tu hijo(a) haya incorporado a esa persona excluida a su vida y la esté representando.

¿Cómo se puede sanar la adición de un hijo?

Existen múltiples especialistas en el área que pueden ayudar. Pero, si no se sanan las causas ocultas el problema persistirá. Y además, se tiende a perpetuar en otras generaciones. A continuación, expongo cómo se pueden sanar las causas invisibles.

*Estas recomendaciones jamás pueden sustituir la ayuda especializada, simplemente son aspectos a tomar en cuenta en una adicción:

Priorizar la educación de tus hijos, por encima de tu éxito profesional o económico.

Por lo menos hasta los 7 años de edad del niño. Recuerda que antes de esa edad el niño, está totalmente unido a sus padres. Por lo tanto, cualquier ausencia de ellos, le envía la señal al niño que hay algo malo en él. Y por lo tanto, necesita hacer algo extra para llamar su atención.

Si has perdido a un hijo o tuviste una pérdida o aborto, es necesario que realices el duelo.

Que te des tiempo a llorar y sentir el dolor y luego a despedirte de ese hijo. Y recuerda jamás colocarle el nombre a tu hijo de ese niño que murió anteriormente. Hablen en pareja de su dolor, realicen actos simbólicos de despedida (escriban cartas, quemen las cartas, siembren una planta, etc). Recuerda que aunque reprimas el duelo tus hijos captan el mensaje inconsciente.

Resuelve tus conflictos de pareja, construyan su relación en base al la admiración y el respeto. Que tus hijos vean que ambos se aceptan y que se aman. Jamás incluyan a sus hijos en sus problemas de pareja. Y si se separan, mantengan el respeto el uno por el otro. La idea es que no tengan que parcializarse, por uno de los padres.

Una visión Transgeneracional

Profundiza y analiza tu árbol genealógico, y realiza los cierres de duelos. Cuéntales a tus hijos de tus avances en el área y haz que participen. Realicen actividades en familia, que incluyan a los abuelos, tíos y demás miembros de la familia.

Realiza una constelación familiar con un especialista. Que te ayude a través de una configuración sistémica a buscar, las causas de la adicción de tu hijo. Te puede ayudar a descubrir las causas profundas y darte de esta manera una visión transgeneracional.

Fundación Órdenes del Amor